Ceremonioso traslado del Cristo de la Liberación hasta el Colegio Arzobispo Fonseca bajo la húmeda noche salmantina

La noche del Viernes de Dolores pese a la humedad por la lluvia intensa de la tarde que ha provocado la suspensión de la procesión «Vía Matris», ha dejado que a las 23:00 horas el Cristo de la Liberación abandonara su residencia habitual, la capilla del cementerio San Carlos Borromeo, entre la luz tenue de los cirios. Durante el camino estuvo arropado por los hermanos hasta la capilla del Colegio Arzobispo Fonseca, donde permanecerá hasta el Sábado Santo, cuando saldrá en procesión.

La humedad y la noche han acompañado a la imagen de Vicente Cid Pérez, realizada en 1988 después de llevarse a cabo una oración por las víctimas de la COVID-19 y por la paz, sin olvidar «a todas las personas que se han quedado en el camino por la pandemia, ya sean hermanos o familiares”, ha explicado su Hermano Mayor, Manuel González. Este año debido a las circunstancias especiales por la pandemia, la Junta Directiva de la Hermandad, decidió que el traslado fuera realizado por los hermanos de la Hermandad invitada (la Hermandad Jesús Amigo de los Niños, y los hermanos de la Hermandad del Cristo del Amor y de la Paz).

Cabe recordar que este año la Hermandad cumple 50 años y lo van a rememorar con algunos elementos procesionales que salieron por entonces, en los principios de la cofradía.

EN DETALLE:

SALIDA: 23:00 horas desde el cementerio San Carlos Borromeo.

PASOS: Santísimo Cristo de la Liberación (obra de Vicente Cid Pérez, realizado en pasta de alabastro y resinas en 1988).

RECORRIDO: Salida del cementerio San Carlos Borromeo, Glorieta de Ramiro II, camino del Cementerio, avenida Champagnat, cruce con el paseo de San Vicente, Espejo, plaza de Fonseca, Fonseca y capilla del Colegio del Arzobispo Fonseca.

NOMBRE: Hermandad del Cristo del Amor y de la Paz. Sección del Santísimo Cristo de la Liberación.

AÑO DE FUNDACIÓN: 1971.