La garita de Miróbriga podría cambiar de tono tras la desafortunada restauración

La Subdelegación del Gobierno, a través del Ministerio de Cultura, ha respondido a la indignación por el aspecto de la garita restaurada en La Colada, con un tono de mortero demasiado blanco. Señalan que en la última visita de la obra se valorará la conveniencia de contrarrestar el efecto “en la que estarán presentes, como ha sido habitual en todo el proceso, tanto la dirección facultativa del proyecto, como los arquitectos municipales y de la Junta”; una afirmación que contradice la postura de inquietud del Consistorio, desde el que dicen que no han tenido conocimiento de visitas oficiales.

“El Gobierno tiene que responsabilizarse con un Plan Director y seguir los mismos criterios”, declaró el alcalde Marcos Iglesias hace unos días. La intervención se ha llevado a cabo, insisten desde Subdelegación, “en todo momento en coordinación con la Junta y el Ayuntamiento, que han realizado un seguimiento continuo de los trabajos”. Por su parte, el alcalde recordó en su momento que “aquí no ha venido a nadie a interesarse”. El Ministerio justifica las técnicas aplicadas apuntando que “ha estado históricamente revestida; por eso la aplicación de mortero ya se preveía en el proyecto”. Afirman que se ha llevado a cabo siguiendo los criterios profesionales de mínima intervención necesaria, reversibilidad, compatibilidad y estabilidad.