El coordinador de la Unidad de Ictus en Salamanca: “Estamos al nivel de cualquier hospital ‘grande’ del país”

El coordinador de la Unidad de Ictus del Hospital de Salamanca, Luis López Mesonero, celebra la importancia de que el Hospital ya pueda atender los ictus más complejos durante las 24 horas y sin necesidad de enviar a enfermos a Valladolid. “Es una noticia enorme porque nos pone al nivel de cualquier hospital terciario (máxima categoría) en el que los pacientes pueden beneficiarse de cualquier tratamiento”, explica el neurólogo.

Salamanca ya tiene atención completa al ictus desde el martes, 1 de febrero, aunque en su primer día de funcionamiento no hubo ningún caso más tarde de las 15:00, que era el límite que definía cuándo se atiende a un paciente en Salamanca y cuándo es necesario enviarlo a Valladolid. “No hubo ningún caso en la primera tarde, pero estadísticamente sabemos que, desgraciadamente, no tardaremos en recibirlo”, dijo. De hecho, el Hospital de Salamanca atiende una media de 2 o 3 ictus al día: más de 800 todos los años y con previsión de que la cifra crezca.

El neurólogo destaca las graves discapacidades que pueden dejar como secuelas los ictus y recuerda que “la trombectomía es el tratamiento ideal para este tipo de pacientes más graves”.

El Hospital contaba desde hace tiempo con los radiólogos intervencionistas que se van a encargar de atender estos ictus, pero necesitaba otro tipo de dotación para poder organizar el servicio más allá de la jornada vespertina. “Dependíamos de toda la organización como Enfermería, técnicos y radiólogos, por supuesto”. De los cinco radiólogos intervencionistas, dos pueden centrarse en los ictus, mientras que el resto pueden atender los accidentes periféricos.

Lo antes posible

Los neurólogos difunden el mensaje de que ante la mínima sospecha de que un paciente sufre un ictus es vital acudir al hospital lo antes posible. “Ya no se habla de una ventana de tiempo en la que actuar, porque es verdad que los plazos han mejorado, pero está claro que cuanto antes se llegue al hospital, menos posibilidades habrá de que queden secuelas graves”, explica Luis López.