Los alumnos solicitan menos becas en la Universidad y también bajan las concedidas

Las becas reflejan la vuelta a la normalidad en la Universidad de Salamanca. Después de que en 2020-21 se produjera un aumento de casi el 5% en las becas del Ministerio de Educación solicitadas por los alumnos del Estudio charro y de casi un 6% en las ayudas concedidas respecto al periodo anterior, en el actual curso se ha vuelto a las cifras de antes de la pandemia, con 12.019 solicitudes (37 menos que en 2019-20).

La vuelta a las cifras de antes de la pandemia se debe a que este curso se han eliminado las medidas extraordinarias adoptadas para paliar los efectos de la pandemia que llevaron a que un mayor número de solicitantes cumpliera los requisitos académicos —por un lado, la Universidad de Salamanca fijó un plazo extraordinario para modificar o anular los créditos matriculados y, por el otro, el Ministerio estableció que el porcentaje de créditos superados se calculara sobre materias que hubieran podido ser evaluadas debidamente—.

Se produce incluso un ligero descenso en las ayudas concedidas por el Ministerio de Educación respecto a antes de la covid-19, con un total de 7.392 ayudas concedidas que suponen 93 menos que en 2019-20. Esta disminución puede ser consecuencia del fracaso, abandono o cambio de estudios de alumnos de primer curso, lo que implicaría una disminución del número de estudiantes de segundo año que no cumplen los requisitos, sin embargo, no se dispone de los datos suficientes para poder confirmarlo.

Los estudiantes han comenzado ya a recibir parte de las becas concedidas, aunque no el importe completo. Este año se ha producido una mejoría, ya que el Ministerio de Educación ha agilizado la gestión para pagar antes, al menos, la parte fija. A comienzos del mes de diciembre el Servicio de Becas de la Universidad de Salamanca ya había enviado la totalidad de las becas y a las puertas de las vacaciones el Ministerio solo tenía el 0,28% pendiente de cruce con la Agencia Tributaria, de manera que había abonado 7.316 becas, casi el 99% de las concedidas, pero, eso sí, solo había pagado por completo 620. En concreto, el 91,50% del dinero que han recibido los estudiantes corresponde a la parte fija de las becas, que ronda los 1.700 euros, mientras que están pendientes de la parte variable, unos 1.600 euros según los datos del pasado curso, puesto que la cuantía variable depende de la cifra total de alumnos becados y la cantidad total disponible al final del proceso.

El año pasado, cuando se produjo el aumento de becarios, a estas alturas del curso todavía estaban pendientes de cobrar las ayudas del Ministerio de Educación más del 35% de los alumnos de la Universidad de Salamanca, de forma que hay que reconocer el avance que se ha producido al respecto.

Queda por saber ahora la cuantía que recibirán los alumnos becados. El pasado año, las becas del Ministerio de Educación en grado y máster en la Universidad de Salamanca ascendieron a 30,6 millones de euros, 22,4 millones correspondientes a ayudas sin tasas y 8,2 millones de las tasas de matrícula, de manera que de media cada alumno recibió 3.700 euros, sumando la parte fija y variable de las becas.

A estas ayudas habrá que sumar después las que concede la Junta de Castilla y León. De momento no hay datos, puesto que la primera convocatoria de la Consejería de Educación se cerró a finales del pasado año y aún están tramitando las solicitudes.