El buitre negro asegura su pervivencia en La Raya y se extiende a Portugal

La colaboración entre la Fundación Naturaleza y Hombre y la asociación lusa Trashumancia y Naturaleza asegura la pervivencia del buitre negro en la zona de La Raya transfronteriza entre España y Portugal.

Hace ya doce años que las dos organizaciones comenzaron a coordinar sus esfuerzos dirigidos a conseguir que una especie como el buitre negro volviera a criar en los espacios naturales entre los dos países, centrándose en tres reservas naturales con proyectos de conservación para alejarla de una situación de “casi amenazada”.

Este conjunto de actuaciones se han venido realizando en la Reserva Biológica “Sierra de Gata”, con la protección por parte de la Fundación Naturaleza y Hombre de 40 nidos de buitre negro, cerca de la frontera con Malcata y el Valle del Côa (en Portugal); en la Reserva Biológica “Campanarios de Azaba”, también lindante con el área de Malcata, en la que la FNYH aporta alimento suplementario para los ejemplares de buitre negro de la zona sur oeste de la comarca de Ciudad Rodrigo, y, finalmente, en la “Faia Brava”, la mayor reserva privada de Portugal donde la asociación Trashumancia y Naturaleza de Portugal lleva a cabo programas de alimentación de necrófagas.

Los núcleos de gran entidad en la parte española como donantes (la Reserva en Gata), y los núcleos de pequeña entidad en Portugal como receptores (Faia Brava), con el estratégico punto de alimentación gestionado por FNYH en el centro de este corredor (Campanarios de Azaba) y acuerdos en el entorno de Monfragüe han tejido la red natural que —junto a las acciones emprendidas— han permitido al buitre negro expandirse hacia Portugal, donde las zonas de Malcata y Arribes son ya zonas de cría de la especie.