Horizonte de sucesos

 Horizonte de sucesos


Los hombres experimentábamos el tiempo como una especie de sucesión de ciclos, el eterno retorno del estoicismo, hasta que el hijo de un tendero venido a menos y que no lograba destacar como científico en Londres volcó su afán por reformar la sociedad testigo de su fracaso en una primera novela “La máquina del tiempo”. Corría el año 1895 y la humanidad se abrió a esa visión del tiempo, como una dimensión en la que poder moverse hacia atrás y hacia adelante, ligada desde su nacimiento a la ficción de evitar que las cosas sean lo que en realidad son. Hay que reconocerle a H.G.Wells, además de aquel relato apasionante, el haber ideado una entrañable y divertida máquina del tiempo que se movía a pedales. Quizá intuía, visionario, el precio que alcanzaría en España, allá por el año 2021, el uso doméstico de la electricidad.

Fue después Einstein quien describió numéricamente esta ilusión y redujo la ecuación hasta poder justificar matemáticamente que viajar a velocidades cercanas a la velocidad de la luz ocasiona una dilatación del tiempo, de manera que el tiempo del individuo que viaja a esa velocidad corre más lentamente. El tiempo externo avanza a su ritmo y el individuo se adelanta en el futuro. Y hasta aquí puedo llegar. No voy a entrar a resumir la teoría cuántica de campos ni la teoría de cuerdas porque soy de letras. Uno debe ser consciente de sus limitaciones. Y porque, debido a una cuestión generacional, mi visión particular de los viajes en el tiempo quedó emocionalmente anclada al DeLorean y a los acordes sinfónicos de Alan Silvestri. Apenas vuelvo a escuchar esa banda sonora, me transporto de nuevo a mediados de los ochenta, a una butaca de los Cines Van Dyck de Torres Villarroel y a aquella fantaseada aventura con el guapísimo Michael J. Fox. Cosas de adolescentes. Lo que sí parecían tener claro los científicos es que, si bien teóricamente puede hablarse de viajes al futuro, los viajes al pasado son, tanto en la teoría como en la práctica, imposibles. Pero hete aquí que la ministra de Fomento, cargo ahora rebautizado, viene a demostrar lo contrario.

Raquel Sánchez ha hallado la fórmula gracias a la cual trasladará, no a un único individuo sino a toda la ciudad de Salamanca, hasta un momento anterior al 26 de agosto de 1877, fecha en la que, como relata con todo lujo de detalles Roberto Zamarbide, llegó desde Medina del Campo aquella primera locomotora humeante que simbolizaba el progreso y el futuro, de la mano de una Real Orden de 31 de diciembre de 1844, que establecía el carácter de servicio público del ferrocarril. Sin pedales, ni DeLorean, ni gaitas, la ministra ha puesto en marcha un sencillo mecanismo que consiste en no devolver frecuencias ferroviarias, ni siquiera acceder a hablar del asunto con el alcalde, y que en poco tiempo tendrá como inevitable consecuencia el viaje al pasado. Y esto sucede cuando la transformación digital está dibujando el nuevo mapa de España y cuando la movilidad juega un papel clave en el desarrollo económico de las regiones, cuyo reverso es la despoblación. Estamos en lo que los científicos llaman “horizonte de sucesos”, una frontera del espacio-tiempo tras la que los eventos a un lado de ella no pueden afectar a un observador situado al otro lado.

Los méritos científicos y políticos que acredita la ministra para que se hayan puesto en sus manos la movilidad y las posibilidades de desarrollo de todas las regiones de España se reducen a un master en Derecho (¡!), el hecho de haber sido alcaldesa de Gavá (una población catalana aproximadamente del tamaño de Soria) y haber negociado la ampliación del Aeropuerto del Prat (aquí sí que se movieron poder y millones). Y con estos mimbres ahí la tienen: metida a científica cuántica y condenando el futuro de Salamanca, que es el nuestro.



Fuente de la noticia: Pulsa para ver la noticia en el periódico que ha sido publicada.

(Salamanca Realidad Actual es un lector de noticias FEED que unifica las noticias de diferentes periódicos sobre Salamanca. No hemos redactado ninguna de las noticias aquí publicadas y la totalidad de el copyright de esta noticia pertenece a: www.lagacetadesalamanca.es y ).

Salamanca Realidad Actual

https://salamancarealidadactual.com

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *