Los pocos casos en los pueblos salmantinos con mayor incidencia hacen descartar los cribados masivos

La tasa de incidencia acumulada en los últimos 14 días del coronavirus, una de las referencias que toma la Junta de Castilla y León para el establecimiento de medidas excepcionales, puede provocar errores de apreciación sobre el riesgo de contagio en aquellos municipios con menor población.

Así, las tres localidades con mayor tasa de incidencia entre los 28 grandes pueblos de la provincia, La Fuente de San Esteban, La Alberca y Aldeadávila de la Ribera, a pesar de alcanzar cifras muy elevadas de hasta 1.089 casos por cada 100.000 habitantes en La Fuente, tan solo registran en la última actualización ofrecida ayer por la Junta cinco contagios cada una de ellas.

Esta alta incidencia acumulada aunque con un relativo bajo número de positivos hace que se descarte la posibilidad de someter a estas poblaciones a un cribado masivo, tal y como se realizó el pasado domingo en el municipio arribeño de Vilvestre.

Además, hay que tener en cuenta la evolución del número de casos registrados en los últimos siete días, una cifra que tanto en La Fuente de San Esteban como en La Alberca, se ha visto reducida en la última jornada en un positivo, mientras se mantiene igual en Aldeadávila de la Ribera.

Una circunstancia, de alta incidencia con un número relativamente bajo de casos, que se observa más fácilmente en aquellos pueblos con menor población, como Carrascal de Barregas que con tan solo un contagio detectado su incidencia acumulada en los últimos 14 días se eleva hasta los 406 casos/100.000 habitantes, frente a la tasa de 358 casos de Béjar con 25 contagios acumulados.

Esta situación es la que ha llevado a la Junta ha limitar la aplicación de las medidas excepcionales, como el cierre del interior de los bares, a aquellas localidades mayores de 5.000 habitantes si superan los 150 casos/100.000 vecinos.