Una terapia controla los molestos pitidos en los oídos

 Una terapia controla los molestos pitidos en los oídos


El tinnitus o acúfenos, comúnmente conocido como «zumbido en los oídos», son la percepción de sonidos en los oídos o en la cabeza sin que haya una fuente externa de sonido. Pueden manifestarse como un zumbido, silbido, pitido u otros sonidos similares.

Según datos de la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC), se estima que en España entre el 10% y el 15% de la población sufre de acúfenos en algún momento de su vida. Esto significa que alrededor de 4-6 millones de personas en España pueden experimentar acúfenos en algún momento. Y muchas de estas personas no encuentran una solución, a pesar de que ofrecen muchos remedios para su tratamiento.

Susan Shore, profesora emérita del Departamento de Otorrinolaringología de Michigan Medicine y de los Departamentos de Fisiología e Ingeniería Biomédica de la Universidad de Michigan, dirigió una investigación sobre cómo procesa el cerebro la información biosensorial y cómo pueden aprovecharse estos procesos para una estimulación personalizada que permita tratar el tinnitus.

Los resultados se publicaron en «JAMA Network Open».

En el estudio, un ensayo clínico aleatorizado a doble ciego, participaron personas con tinnitus somático, una forma de tinnitus en la que movimientos como apretar la mandíbula o aplicar presión en la frente producen un cambio notable en el tono o el volumen de los sonidos percibidos. Casi el 70% de las personas que padece tinnitus tienen la forma somática.

Según Shore, podían participar candidatos con tinnitus somático molesto y pérdida de audición de normal a moderada.

«Tras inscribirse, los participantes recibieron un dispositivo portátil desarrollado y fabricado por in2being, LLC, para uso doméstico», explica. «Los dispositivos se programaron para presentar el espectro de tinnitus personal de cada participante, que se combinó con la estimulación eléctrica para formar un estímulo biosensorial, mientras se mantenía el cegamiento del participante y del equipo del estudio.»

Los participantes en el estudio fueron asignados aleatoriamente a uno de dos grupos. El primer grupo recibió primero el tratamiento biosensorial (activo), mientras que el segundo recibió el tratamiento de sonido solo (control).

Durante las seis primeras semanas, se indicó a los participantes que utilizaran sus dispositivos durante 30 minutos al día. Las seis semanas siguientes los participantes descansaron del uso diario, seguidas de otras seis semanas del tratamiento recibido al principio del estudio.

  • Reentrenamiento del tinnitus: Técnicas de terapia cognitivo-conductual para a cambiar la respuesta y percepción del acúfeno, de modo que se vuelva menos intrusivo y molesto.

  • Terapia de sonido: Se utiliza la generación de sonidos suaves y agradables para enmascarar o distraer la atención del acúfeno. Esto puede incluir el uso de dispositivos generadores de ruido blanco, música suave, sonidos de la naturaleza u otros sonidos relajantes.

  • Gestión del estrés y relajación: El estrés y la ansiedad pueden empeorar la percepción de los acúfenos. Técnicas de relajación como la meditación, la respiración profunda, el yoga y la terapia de relajación muscular progresiva reducen la respuesta al estrés y mejorar el bienestar general.

  • Tratamiento de problemas auditivos: Si los acúfenos están asociados con problemas de audición, se pueden recomendar dispositivos de ayuda auditiva, como audífonos, para mejorar la audición y reducir la percepción del acúfeno.

Shore señala que cada semana, los participantes completaban el Índice Funcional de Acúfenos, o TFI, y el Inventario de Minusvalías de Acúfenos, o THI, que son cuestionarios que miden el impacto que tiene el acúfeno en la vida de las personas. También se evaluó la intensidad del tinnitus de los participantes.

Los efectos beneficiosos se observaron cuando sólo recibieron estimulación sonora.

Además, más del 60% de los participantes informaron de una reducción significativa de los síntomas del tinnitus tras las seis semanas de tratamiento activo, pero no durante el tratamiento de control. Esto concuerda con un estudio anterior del equipo de Shore, que demostró que cuanto más tiempo recibían los participantes el tratamiento activo, mayor era la reducción de los síntomas del tinnitus.

«Este estudio allana el camino para el uso de la estimulación biosensorial personalizada como tratamiento eficaz del tinnitus, dando esperanzas a millones de personas que lo padecen», afirma Shore.



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