Cuando la ciencia ficción se aplica a la cirugía: tecnología 7D para corregir la escoliosis infantil

El doctor David M. Farrington y su equipo han incorporado la tecnología 7D para una cirugía en un niño de 14 años que padecía una escoliosis severa progresiva.

Dicho así, fríamente y de corrido, la noticia puede parecer una más. Pero no lo es. Se trata de la cuarta intervención de este tipo que se realiza en España y la primera en la sanidad privada, concretamente en el Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón de Sevilla. Y a partir de aquí queda abierto un horizonte de posibilidades extraordinarias.

Hablar de tecnología 7D es usar palabras mayores en el campo de la realidad virtual de última generación. Por explicarlo de forma fácil: cuando hablamos de 3D nos referimos a un efecto de profundidad en las imágenes que están frente a nosotros en una pantalla y que podemos visualizar con gafas o sin ellas. La tecnología 7D permite la inmersión dentro de una realidad, experimentar olores, sonido inmersivo y hasta sensaciones.

En consecuencia, sus aplicaciones son infinitas y resultan sugerentes en el campo de la ciencia ficción o de nuestro futuro más inmediato. Pero no hay que irse tan lejos: la medicina actual, aquí en España, ya está empezando a valerse de esta herramienta para abordar la cirugía de la escoliosis en un paciente infantil.

Cirugía de riesgo

Es en estos casos severos en los que interviene la cirugía. El doctor Farrington y su equipo desarrollan más de treinta intervenciones al año en el Servicio de Traumatología y Ortopedia Pediátrica de Quirónsalud Sagrado Corazón de Sevilla. Se trata de una cirugía basada en la implantación de tornillos pediculares en la columna del paciente. El propio doctor Farrington explica que «esta técnica no está exenta de riesgos porque cualquier error en la orientación de un tornillo puede tener consecuencias devastadoras, ya que por la parte externa de la vértebra se encuentran arterias o venas de gran calibre que podrían sufrir una lesión vascular severa; y por la parte interna se encuentra la médula, que, de verse dañada, podría producir una paraplejia. Esto se traduce en que debemos ser extremadamente precisos para no provocar secuelas irreversibles al paciente».

Es en este punto en el que interviene la tecnología 7D. Para la corrección quirúrgica de la escoliosis guiada por navegación se realiza al paciente un TAC previo a la intervención. A partir de esta prueba, la tecnología 7D realiza una recreación virtual de la columna del paciente donde indicará, tras marcar el cirujano tres puntos de referencia, la orientación exacta por donde deben introducirse los tornillos pediculares. «El navegador actúa como un GPS, guiando al cirujano para la colocación precisa de los tornillos«, explica el Dr. Farrington.

De este modo, el sistema 7D no solo aporta seguridad tanto para el paciente como para el cirujano, minimizando los riesgos de la cirugía al mostrar de manera exacta la trayectoria que debe seguir el tornillo pedicular, sino que evita la exposición del paciente a radiaciones ionizantes durante la cirugía, algo especialmente importante en el caso de los pacientes pediátricos.

Según la Asociación Americana de Cirujanos Neurológicos (AANS), entre el 2 y el 3 por ciento de los niños y adolescentes están afectados por la escoliosis.

La Asociación Española de Pediatría ha publicado estudios que acreditan la presencia de este mal entre adolescentes de determinadas zonas en cifras muy superiores al 10 por ciento.

Por esta razón, y más allá de la ciencia ficción, esta aplicación de la tecnología 7D, presenta ya en nuestro país, resuelve uno de los principales inconvenientes de los sistemas de navegación tradicionales, lo que permite a los cirujanos realizar cirugías de columna más rápidas, eficientes, rentables y sin radiación y con ello abre un horizonte de esperanza a muchos enfermos de escoliosis, mucho más sugerente cada día.