La Ciudad de los Niños de Carbajosa de la Sagrada participa este año junto al IBSAL en la Noche Europea de los Investigadores

El Ayuntamiento de Carbajosa, a través del programa municipal Ciudad de los Niños de Carbajosa de la Sagrada, participa este año junto al IBSAL en la Noche Europea de los Investigadores, un evento público anual impulsado por la Comisión Europea para acercar la ciencia a la sociedad. La idea es mostrar la diversidad de la investigación y su impacto en la vida cotidiana de los ciudadanos, así como estimular el interés por las carreras científicas y técnicas, especialmente entre los jóvenes.

“Paciente cero, evita que el virus se propague” es el nombre del Scape Room que se está celebrando este viernes y que cuenta con las investigadoras Conchi Lillo y Pilar Armero. En esta actividad están participando un total de 120 niños, repartidos en seis sesiones consecutivas de 30 minutos.

La Noche Europea de los Investigadores se celebra este viernes en nuestra Comunidad Autónoma bajo el lema ‘Origen Castilla y León, destino mundo’ (http://nocheinvestigadorescyl.org/). Es un proyecto innovador que une a varias entidades y que este año cuenta con la participación del Instituto de Investigación Biomedicina de Salamanca (IBSAL), en colaboración con el Ayuntamiento de Carbajosa de la Sagrada a través del proyecto Ciudad de los Niños.

El Scape Room presenta el siguiente planteamiento: una de las investigadoras del IBSAL está analizando unas muestras urgentes de pacientes que podrían estar infectados con un virus. Uno de ellos ha dado positivo y es muy importante contactarle rápidamente para que se ponga en cuarentena.

Sin embargo, la identidad de las muestras está codificada, así que hay que descubrir el nombre de la persona y avisarla. Los jóvenes participantes tienen que ayudar a la investigadora para evitar que el virus se propague e infecte a más gente. En 20 minutos tienen que mirar bien todas las pistas, resolver los enigmas y utilizar las claves ocultas para descifrar la identidad del Paciente Cero. Sus conocimientos científicos sobre el cuerpo humano son claves para conseguir resolver con éxito el enigma.